Tratamiento natural de la disfunción eréctil

Una guía holística que abarca desde nutrición y suplementación, hasta manejo de hábitos y terapias.

La disfunción eréctil (DE) es la incapacidad, de lograr o mantener una erección lo suficientemente fuerte como para realizar una penetración o mantener una relación sexual satisfactoria ante una estimulación sexual adecuada.

La disfunción eréctil es un proceso complejo en el que intervienen cerebro, hormonas, emociones, nervios, músculos y vasos sanguíneos y, por lo tanto, sus causas potenciales son muy variadas. En consecuencia, también existen muchos tratamientos disponibles, entre los que se incluyen cambios en el estilo de vida, terapia, medicamentos de receta y soluciones naturales para tratar este trastorno.

Aunque los remedios naturales para la disfunción eréctil han ganado popularidad, muchos de ellos no han sido bien investigados y tampoco están regulados en términos de seguridad o eficacia.

En este artículo analizaremos las opciones de tratamientos naturales, incluyendo aquellos que han demostrado ser eficaces, así como los que implican posibles riesgos.

NOTA

El contenido de este artículo, se basa en opiniones médicas y científicas de portales especializados en medicina especializada en la salud eréctil y bases de datos científicas como la Revista Internacional de Investigación sobre la Impotencia (IJIR abreviatura en inglés), JAMA, University of Michigan Health, y el Centro Nacional para la Información Biotecnológica (NCBI abreviatura en inglés) entre otras.

Si deseas confirmar la veracidad de los resultados, opiniones y temas especializados tratados en este escrito, podrás hacerlo a través de las 18 fuentes de referencia usadas en esta investigación, cuyos enlaces se encuentran al final del artículo.

Dieta saludable (mediterránea)

Se ha demostrado que llevar una dieta rica en alimentos naturales y nutrientes, como frutas, verduras, cereales integrales y pescado, con menos carnes rojas y procesadas y cereales refinados, disminuye la probabilidad de padecer disfunción eréctil.

En un estudio realizado en más de 21.000 personas se descubrió que los hombres que seguían en mayor medida una dieta mediterránea o del Índice de Alimentación Saludable Alternativa 2010 (AHEI-2010) -que hace hincapié en el consumo de verduras, frutas, frutos secos, legumbres y pescado u otras fuentes de grasas de cadena larga, y que evitan las carnes rojas y procesadas- resultan menos propensos a desarrollar una disfunción eréctil.

De hecho, los hombres menores de 60 años que seguían más de cerca la dieta mediterránea tenían un 40% más de probabilidades de mantener una función sexual normal.

Cabe destacar que una dieta saludable para el corazón también reduce los factores de riesgo cardiovascular, como la presión arterial, el azúcar en sangre y los niveles de colesterol.

Se sabe que estos problemas de salud contribuyen en gran medida al desarrollo de la disfunción eréctil.

Suplementos naturales

Aunque los estudios preliminares sugieren que algunos suplementos naturales pueden ser útiles, el tratamiento de la disfunción eréctil no ha sido aprobado por la FDA y posiblemente, tampoco estén aprobados fuera de Estados Unidos.

Además, estos productos no están regulados y pueden contener ingredientes no revelados, dosis inapropiadas de medicamentos de receta o dosis residuales diferentes a las sugeridas en la etiqueta.

También debes tener en cuenta que, a pesar de etiquetarse como “natural”, también pueden presentar efectos secundarios potencialmente graves, e interactuar con otros medicamentos y terapias.

Esto subraya la importancia de comentar cualquier cambio en la medicación y así como el inicio de cualquier suplementación con tu médico de cabecera.

En su gran mayoría, los suplementos dietéticos y remedios naturales para la disfunción eréctil tienen la suficiente evidencia anecdótica como para ser en mencionados.

Sin embargo, es importante aclarar, que existen pocos estudios científicos para respaldar dicha evidencia, lo que quizás se deba principalmente a falta de recursos e interés por parte de la comunidad científica.

Dicho esto, los siguientes remedios y suplementos naturales, son los que, en mayor medida, se les atribuyen beneficios en el tratamiento natural de la disfunción eréctil:

  • L-arginina: La L-arginina es un aminoácido muy potente como vasodilatador. Esto significa que puede abrir los vasos sanguíneos, lo que ayuda a aumentar el flujo de sangre al pene. En teoría, esto debería facilitar las erecciones, pero los estudios han tenido opiniones contradictorias. Se necesita más investigación para estudiar su seguridad y eficacia.
  • Propionil-L-carnitina: Según algunas fuentes, tomar propionil-L-carnitina junto con el Viagra podría mejorar la función eréctil con respecto a tomar únicamente el Viagra, pero se necesita más investigación. Los posibles efectos secundarios incluyen erupciones cutáneas, náuseas, diarrea y ardor de estómago. La toma de propionil-L-carnitina no se recomienda a quienes padecen enfermedades vasculares, hipertensión arterial, diabetes o cirrosis hepática, entre otras afecciones.
  • Dehidroepiandrosterona (DHEA): Esta hormona se utiliza para estimular la producción de hormonas sexuales entre las que se encuentran la testosterona y el estrógeno. Algunos estudios sugieren que los suplementos de DHEA puede ayudar con la disfunción eréctil, pero otros no han encontrado evidencia que respalde dicho beneficio.
  • Ginkgo: Esta hierba, otro potente vasodilatador, contribuye al incremento del flujo sanguíneo hacia el pene, lo que podría mejorar el deseo sexual y contrarrestar la disfunción eréctil. Sin embargo, el ginkgo no debe tomarse nunca con warfarina (Coumadin), un anticoagulante, o si se padece cualquier tipo de trastorno hemorrágico.
  • Ginseng: Se cree que el ginseng, o Panax ginseng, promueve la relajación de los músculos lisos del cuerpo y aumenta el flujo sanguíneo, lo que contribuye a provocar una erección. Su principal efecto secundario es el insomnio, factor que eleva el riesgo de disfunción eréctil, por lo que es necesario realizar más investigaciones para determinar su eficacia en términos generales.
  • Yohimbina: Esta hierba es un afrodisíaco tradicional para el tratamiento de la disfunción eréctil. Sin embargo, en algunos casos, la yohimbina ha provocado efectos secundarios graves, como ataques al corazón y convulsiones.
  • Hierba de cabra en celo: El Epimedium grandiflorum, también conocido como hierba de cabra córnea, es un remedio tradicional destinado al incremento de la fertilidad, pero no existen pruebas suficientes que respalden su uso para la disfunción eréctil.

Ejercicio regular

Mantener una rutina de ejercicio regular es especialmente útil para aquellos cuya disfunción eréctil se debe a problemas de sedentarismo, mala circulación, obesidad, baja testosterona o enfermedades cardiovasculares.

El ejercicio reduce la presión arterial y el azúcar en sangre, incrementa la circulación sanguínea en todo el cuerpo y mejora la salud del corazón. También es una de las mejores opciones naturales para incrementar los niveles de testosterona.

Quemar grasa también disminuye el riesgo de padecer enfermedades vasculares y diabetes, dos de las principales causas de la disfunción eréctil.

Curar la disfunción eréctil no significa necesariamente que debas hacer cambios drásticos. Incluso un pequeño aumento en la actividad puede marcar la diferencia.

De hecho, un estudio descubrió que los pacientes que se recuperaban de un ataque al corazón y que se sometieron a un programa de caminatas progresivas, comenzando con sólo seis minutos al día, registraron un 71% menos de incidencias de disfunción eréctil durante 30 días que los que no caminaron.

Otras investigaciones han sugerido que el ejercicio moderado puede ayudar a restaurar el rendimiento sexual en adultos obesos de mediana edad con disfunción eréctil.

Higiene del sueño

Cuando estás cansado, es difícil mantener tu deseo sexual. La falta de sueño afecta a tu vida sexual de varias maneras, por ejemplo:

  • Reducción del deseo sexual (libido)
  • Incapacidad de conseguir una erección
  • Incapacidad de rendimiento (mantener una erección)

La explicación para esto es que la testosterona es producida mientras dormimos. Un nivel bajo de testosterona provoca bajo rendimiento sexual.

La falta de sueño también está asociada a obesidad, depresión, ansiedad y enfermedades cardiovasculares, factores independientes, pero de alto riesgo para la disfunción eréctil.

Trastornos del sueño como apnea obstructiva del sueño, insomnio, trastorno por turnos de trabajo y síndrome de las piernas inquietas son condiciones comunes asociadas con la disfunción eréctil y otros trastornos urológicos.

Pérdida de peso

Perder peso es un objetivo saludable por muchas razones, pero ¿puede una de esas razones estar relacionada con la cura de la disfunción eréctil? La respuesta corta es que sí.

La pérdida de peso tiene la doble ventaja de aliviar directamente la disfunción eréctil y mejorar tu salud física.

Bajar unos cuantos kilos reduce la presión arterial y evita que se produzcan más estrechamientos y obstrucciones en las arterias, lo que permite que la sangre circule con mayor eficacia.

Los estudios han demostrado que el exceso de grasa abdominal puede provocar la incapacidad de conseguir o mantener una erección.

El endotelio, una pequeña vaina de tejido que forma el revestimiento interior de todos nuestros vasos sanguíneos, puede resultar dañado por el exceso de grasa abdominal.

Como resultado, el organismo podría no liberar suficiente óxido nítrico, una molécula que permite la relajación de las paredes de los vasos sanguíneos para que éstos se dilaten y se produzca la erección.

Además, el exceso de peso puede reducir los niveles de testosterona e incrementar los niveles de estradiol, una hormona femenina, lo que complica aún más el problema.

Por suerte, reducir la cintura puede revertir la disfunción eréctil.

En un importante estudio, más del 30% de los participantes minimizaron, si no curaron por completo, su disfunción eréctil tras perder un 10% de su peso corporal al consumir 300 calorías menos al día y practicar más ejercicio durante varias semanas.

La pérdida de peso suele producirse al reducir la ingesta de calorías y al aumentar la actividad física.

Aumentar la actividad física parece especialmente útil para reducir los índices de disfunción eréctil. El Estudio sobre el Envejecimiento Masculino de Massachusetts descubrió que las personas que comenzaron a hacer ejercicio con regularidad a los 40 años redujeron en un 70% la tasa de disfunción eréctil en comparación con las que llevaban un estilo de vida sedentario.

Terapia y asesoramiento psicológico

Si padeces una disfunción eréctil, lo primero que debes hacer es evaluar si existe algún problema físico o psicológico subyacente.

Si consideras que la ansiedad por el rendimiento es la causa de tu problema con la DE, es posible que te recomienden terapia sexual.

La terapia sexual es especialmente útil cuando existen problemas psicológicos tales como estrés o ansiedad.

Puedes asistir con tu pareja o elegir ir solo, aunque la terapia de pareja tiene el beneficio añadido de ayudar a tu cónyuge sobre la mejor forma de apoyarte.

La terapia sexual te ayuda a comprender y aceptar que emociones, como la ansiedad o la tristeza, desempeñan un papel integral en la disfunción sexual y que incluso podrían asociarse o agravarse con otros factores o respuestas físicas.

El fundamento de la terapia sexual es el siguiente:

  • Ambos miembros de la pareja comparten la responsabilidad de ayudar a resolver el problema, incluso si éste se debe a causas físicas.
  • Tanto tú como tu pareja recibirán información y educación sobre técnicas sexuales.
  • Es necesario cambiar cualquier actitud negativa hacia el sexo.
  • También es necesario abrir líneas de comunicación entre tú y tu pareja.
  • La terapia cognitivo-conductual o el apoyo psicológico son útiles para aquellos que padecen ansiedad general, depresión o TEPT.
  • A menudo, mejorar las condiciones de salud mental contribuye también a potenciar la libido, la capacidad de conseguir y mantener una erección y el rendimiento sexual.

Reduce el estrés

La disfunción eréctil puede ser el síntoma de una enfermedad subyacente. A menudo, afecciones como la depresión, la ansiedad y la hipertensión arterial se deben al estrés en el trabajo o en el hogar.

Aunque la terapia o el asesoramiento psicológico son útiles, otras terapias para reducir el estrés, como la acupuntura y el ejercicio, también pueden ayudar.

Al igual que el alcohol, el estrés interfiere con las señales entre el cerebro y el cuerpo que consiguen y mantienen las erecciones.

Cualquier tipo de estrés, ya sea moderado o intenso, puede causar disfunción eréctil.

Los tipos de estrés más comunes que causan disfunción eréctil son:

  • Estrés psicológico (por ejemplo, depresión, trastorno de estrés postraumático, problemas de baja autoestima, traumas sexuales).
  • Ansiedad por el rendimiento.
  • Estrés profesional.
  • Acontecimientos que alteran la vida, como la muerte de un familiar o amigo, un divorcio, un cambio en el estado de salud, la contratación o el despido de un trabajo, problemas económicos, la crianza de los hijos o problemas de pareja.

Reduce el consumo de alcohol

Beber grandes cantidades de alcohol dificulta lograr y mantener una erección, ya que este interfiere con los mensajeros encargados de transmitir las señales necesarias, que desencadena el proceso de llenar el pene de sangre.

Un estudio que analizó a casi 50.000 hombres descubrió que más de la mitad de los que declararon ser dependientes del alcohol, tenían algún tipo de disfunción sexual, y una cuarta parte citó la disfunción eréctil como su principal problema.

El consumo crónico de alcohol también interfiere en la producción de testosterona, la hormona que rige el funcionamiento sexual masculino.

Y como es bien sabido, la disminución en los niveles de testosterona afecta la producción de esperma y el deseo sexual.

El consumo excesivo de alcohol también se ha asociado con:

  • Bajo deseo sexual: (libido)
  • Reducción del tamaño de los órganos sexuales: El consumo excesivo de alcohol durante mucho tiempo puede hacer que los testículos y el pene reduzcan su tamaño.
  • Menor fertilidad
  • Mayor índice de infecciones de transmisión sexual: Los consumidores crónicos de alcohol son más propensos a realizar prácticas sexuales de alto riesgo.

Si el consumo de alcohol es el único factor que esté causando la disfunción eréctil, ésta suele desaparecer una vez que se deja de consumir.

Deja de fumar

El tabaquismo es un factor de riesgo importante relacionado con el desarrollo de la disfunción eréctil, ya que provoca cambios vasculares en el endotelio de los vasos sanguíneos que interfieren en la producción y señalización del óxido nítrico.

Fumar también provoca cambios vasculares que incrementan el riesgo de padecer enfermedades cardíacas, hipertensión y diabetes; condiciones que también se relacionan con el desarrollo de la disfunción eréctil.

Además, muchos hombres fuman para reducir su ansiedad por el rendimiento sin saber que, con ello están agravando el problema.

Es posible que dejar de fumar no revierta la disfunción eréctil, pero contribuye en gran medida a mejorar la salud en general, así como la condición del pene.

Riesgos del tratamiento natural de la disfunción eréctil

La disfunción eréctil ha sido tratada con hierbas, suplementos y otros remedios naturales durante mucho tiempo y en diferentes culturas alrededor del mundo, pero no existe un consenso general acerca de su efectividad, y al igual que los tratamientos médicos, cuentan con críticas mixtas.

Sin embargo, a diferencia de los medicamentos de receta para la disfunción eréctil, los remedios a base de hierbas no han sido rigurosamente probados ni bien estudiados.

Esto significa que pueden causar efectos secundarios inesperados, o tener interacciones desconocidas con otros medicamentos que estés tomando (ya sean recetados o de venta libre).

Por lo tanto, si estás pensando en utilizar cualquier remedio natural o suplemento que no haya sido autorizado por la FDA, o el respectivo organismo de control en tu país, lo más sensato es consultar con tu médico antes de consumirlo.

Recuerda que dicho remedios o suplementos los consumes bajo tu propio riesgo debido a que sus perfiles de seguridad no han sido establecidos.

Además, algunos que estos remedios pueden hacer afirmaciones que no son ciertas o como se ha visto en algunos casos, contener dosis inadecuadas de compuestos usados en la fabricación de medicamentos de receta, como el sildenafilo (ingrediente activo del Viagra), pero que pueden funcionar de otra manera.

Cuando el tratamiento natural para la disfunción eréctil no funciona

Si has seguido un tratamiento natural y este no ha tenido los resultados esperados, es posible que sea el momento de considerar otras opciones.

Los medicamentos recetados, como Viagra y Cialis, son muy populares y ayudan a los hombres a conseguir y mantener la erección, pero se ha descubierto recientemente, que en algunos hombres dejan de surtir efecto al cabo de dos años o un poco más.

Y adicional a eso, también están los efectos secundarios que, en algunos casos pueden ser potencialmente graves.

Por otro lado, además del tratamiento médico convencional y del tratamiento natural con remedios y suplementos, existe otra alternativa terapéutica que está tomando cada vez mayor popularidad para tratar la disfunción eréctil.

Se trata de una terapia holística, que trata la condición de manera integral, y que cubre con mayor eficacia, los desequilibrios en la relación mente – cuerpo – nutrición, que pueden estar causando la disfunción, y otros problemas directa o indirectamente relacionados con el rendimiento sexual.

Conoce más acerca del tratamiento holístico para la disfunción eréctil.


Fuente y enlaces externos