Libido es el término utilizado para describir el apetito o impulso sexual que, a su vez, está influenciado por las hormonas, la función cerebral y los comportamientos aprendidos durante la vida sexual, independientemente del sexo biológico, la identidad de género o la orientación sexual de una persona.
La libido varía de una persona a otra. Algunos hombres tienen una libido «alta» mientras que otros tienen una libido «baja».
La libido también puede fluctuar debido a estados emocionales, niveles hormonales y salud física de una persona.
Dicho esto, durante mis investigaciones no pude encontrar una definición establecida, para describir una libido «normal».
Pero entonces, ¿cómo saber si mi libido es alta o baja?
En ese sentido, los especialistas médicos consideran una libido alta o baja, cuando ésta interfiere con tus relaciones, tu función sexual, y tu bienestar o calidad de vida.
En este artículo, analizaremos las causas y los síntomas de la libido baja, ya que, es un factor importante que nos permite entender la disfunción eréctil de una manera más amplia.
Contenido
Causas potenciales de la libido baja
La libido y la sexualidad a menudo se confunden. En muchas culturas, se espera que los hombres tengan, y a menudo se les elogia por ser dueños de un alto deseo sexual. Por el contrario, las mujeres pueden ser censuradas por tener el mismo apetito o deseo sexual.
Sin embargo, la libido es una descripción del deseo sexual en general, sin juicios o expectativas culturales.
En psicología, la libido a menudo se describe como un componente del «instinto de vida» o el «impulso biológico instintivo» para el sexo.
En medicina, la libido se utiliza con frecuencia para evaluar el estado emocional, la función sexual o la respuesta a problemas de salud o tratamientos médicos de una persona.
En cualquier aspecto, la libido no se considera «buena» ni «mala». Es simplemente un estado del ser que puede cambiar o fluctuar por varias razones.
Pero independientemente de la manera en que se defina, lo más importante que debemos saber es que, las vías neurales y bioquímicas que están involucradas en este proceso (la libido), son en últimas, las responsables de provocar la excitación sexual, que desencadena una respuesta fisiológica que, en nuestro caso es la erección del pene.
Que es la libido baja
La libido baja es más común que la libido alta y tiene un mayor número de causas potencialmente tratables.
De manera amplia, los médicos las clasifican como psicológicas (relacionadas con la mente), fisiológicas (relacionadas con el cuerpo), farmacéuticas (relacionadas con medicamentos) o patológicas (relacionadas con enfermedades).
Síntomas
No existen criterios clínicos para diagnosticar la libido baja.
Además, existe un alto grado de variación en la forma en que se experimenta la libido, ya que lo «normal» es algo que como dijimos anteriormente, varía de un individuo o a otro.
Sin embargo, los síntomas de una libido baja comúnmente citados por los médicos incluyen:
- Pérdida del deseo sexual hacia la pareja.
- Desinterés por la masturbación
- Pocas o ninguna fantasía sexual.
- Estrés o preocupación por la falta de interés en el sexo.
Causas
Lo hombres experimentamos una libido baja en respuesta a la disminución de la testosterona.
Esto se debe a que estamos especialmente influenciados por esta hormona ya que, está involucrada en la producción de esperma, la función sexual y el desarrollo de características masculinas secundarias, como el vello facial y el incremento de la masa muscular.
Según los expertos, un bajo nivel de testosterona se define como menos de 300 nanogramos por decilitro de sangre, y se denomina hipogonadismo.
Ahora, dado que los niveles de testosterona en el hombre disminuyen en un 30% de los 30 a los 60 años, el hipogonadismo es una condición relativamente común.
El estrés es otro factor importante que afecta indirectamente las hormonas sexuales, ya que provoca la liberación de cortisol y epinefrina (adrenalina), dos hormonas conocidas por disminuir los niveles de testosterona.
Otras posibles causas de la libido baja incluyen:
- Diabetes
- Hipertensión
- Fatiga crónica
- Antidepresivos
- Ansiedad y depresión
- Consumo excesivo de alcohol
- Problemas de pareja
- Baja autoestima y problemas de imagen corporal
- Tabaquismo
- Uso de drogas recreativas.
Tratamiento
La clave para tratar efectivamente la baja libido es identificar la causa.
En muchos casos, puede ser necesaria una combinación de enfoques para mejorar el impulso sexual.
Los siguientes, son algunos de los tratamientos recomendados por los profesionales médicos:
Cambios en el estilo de vida
Hábitos como el tabaquismo, el abuso del alcohol y una vida sedentaria, pueden contribuir de manera importante a la libido baja.
Abordar estos problemas puede mejorar tu energía e interés sexual. Esto puede implicar:
- Hacer más ejercicio
- Seguir una dieta sana y nutritiva
- Manejar el estrés
- Dejar de fumar y cortar con el uso de drogas recreativas, o el excesivo consumo de alcohol.
Terapia de comportamiento
Un terapeuta especializado en temas sexuales puede ayudarte a ti y a tu pareja a identificar las fuentes emocionales de la libido baja.
Éste profesional también está en la capacidad de ofrecerte consejos prácticos para incrementar el deseo y disfrute sexual.
Medicamentos
Solo se sabe que unos pocos medicamentos son útiles para mejorar la libido baja.
Para los hombres, los médicos especialistas casi siempre prescriben medicamentos para la disfunción eréctil como Viagra (sildenafilo), que pueden incrementar la confianza en hombres con ansiedad por rendimiento.
Algunos remedios naturales también ayudan a aumentar la libido, incluyendo la raíz de maca (Lepidium meyenii) y la hierba de cabra en celo (Epimedium grandiflorum).
Lo que funcionó para mí
El problema con los medicamentos para la disfunción eréctil (por lo menos en mi caso), es que crean una dependencia psicológica bastante fuerte.
Además, no trata la raíz del problema. Aunque puedes lograr una erección lo suficientemente firme y duradera como para tener una relación sexual satisfactoria, el deseo sigue estando ausente.
Lo mismo sucede con los suplementos que, aunque no causan la misma dependencia, siguen atacando el síntoma más no la causa raíz del problema.
Lo que funcionó para mí, fue una combinación de manejo psicológico y nutrición.
Haz clic si deseabas saber más acerca de ese programa.
Fuentes y enlaces externos
- Dosch A, Rochat L, Ghisletta P, Favez N, Van der Linden M. Factores psicológicos involucrados en el deseo sexual, la actividad sexual y la satisfacción sexual: una perspectiva multifactorial . Comportamiento sexual del arco. 2016;45(8):2029-45. doi:10.1007/s10508-014-0467-z
- Calabrò RS, Cacciola A, Bruschetta D, et al. Neuroanatomía y función del comportamiento sexual humano: ¿un tema descuidado o desconocido? Comportamiento cerebral . 2019 diciembre;9(12):e01389. doi:10.1002/brb3.1389
- West SL, D'Aloisio AA, Agans RP, Kalsbeek WD, Borisov NN, Thorp JM. Prevalencia de bajo deseo sexual y trastorno de deseo sexual hipoactivo en una muestra representativa a nivel nacional de mujeres estadounidenses. Arch Intern Med . 2008;168(13):1441-1449.
- Goldstein I, Kim N, Clayton A, et al. Trastorno del deseo sexual hipoactivo . Actas de la Clínica Mayo . 2017;92(1):114-28. doi:10.1016/j.mayocp.2016.09.018
- Brawer MK. Reemplazo de testosterona en hombres con andropausia: una descripción general. Rev Urol . 2004;6(Suplemento 6):S9-S15.
- Hamilton LD, Rellini AH, Meston CM. Cortisol, excitación sexual y afecto en respuesta a estímulos sexuales. J Sexo Med . 2008;5(9):2111-2118. doi:10.1111/j.1743-6109.2008.00922.x
