Cada vez son más los hombres menores de 50 años (e incluso menos) que, en algún momento de la vida comenzamos a tener problemas para mantener una erección, el tiempo suficiente para tener relaciones sexuales.
Y adicional al inconveniente que significa lograr una erección satisfactoria, la disfunción eréctil también nos genera problemas emocionales y psicológicos, incluidos sentimientos de vergüenza y culpa.
En algunos casos, esta condición nos conduce a una pérdida de intimidad, que afecta el bienestar mental de ambos miembros de la pareja.
Este artículo analiza los signos y síntomas de la disfunción eréctil. También menciona varias condiciones relacionadas con la eyaculación, que a menudo ocurren junto con la disfunción eréctil, así como las circunstancias en que este problema debe ser consultado con un profesional médico.
Contenido
Síntomas Frecuentes
La disfunción eréctil es un problema común que tan sólo en Estados Unidos, lo padecen más de 30 millones de hombres, y se estima que por lo menos el 50% de los hombres entre una edad de 40 a 70 años, sufren de esta condición.
En España, alrededor de 2.5 millones de hombres sufren de disfunción eréctil y se calcula que, a nivel mundial, la DE es una enfermedad que, en promedio, afecta del 16 al 20% de todos los hombres entre 20 y 75 años.
La ED generalmente se desarrolla con el tiempo, pero también puede aparecer repentinamente sin razón aparente.
Los principales síntomas de la disfunción eréctil se pueden resumir en dos tipos de episodios:
El primero, consiste en una incapacidad de lograr una erección lo suficientemente firme, como para tener relaciones sexuales satisfactorias, y
El segundo, es cuando a pesar de lograr una erección, ésta no se mantiene el tiempo suficiente como para completar la relación sexual, o lograr un disfrute pleno.
Sin embargo, debes tener en cuenta que la frecuencia de los episodios, es lo que define la diferencia entre tener disfunción eréctil y no tenerla.
Según los especialistas, tener un episodio esporádico, en lugar de tenerlo frecuentemente, no es un signo de disfunción eréctil.
Aunque desafortunadamente, en muchos casos los episodios esporádicos, son tan solo el inicio de un problema que tiende a agravarse con el tiempo.
Por lo general, la disfunción eréctil también causa angustia emocional y psicológica que, a su vez, afecta su relación, su autoestima, y casi siempre, genera sentimientos de culpa, vergüenza u otras emociones desgastantes y negativas.
Condiciones asociadas
Algunos hombres con DE tienen problemas para eyacular (disfunción eyaculatoria), mientras que otros, eyaculan demasiado rápido durante las relaciones sexuales.
La disfunción eréctil y la disfunción eyaculatoria son las dos dificultades sexuales más comunes en los hombres, y a menudo ocurren simultáneamente, a pesar de ser trastornos diferentes.
Los tipos de disfunción eyaculatoria incluyen:
- Eyaculación precoz: cuando un hombre eyacula a los pocos minutos de la penetración o antes de lo que él y su pareja quisieran.
- Eyaculación retardada: cuando un hombre no puede eyacular dentro de un período de tiempo razonable de estimulación sexual.
- Eyaculación retrógrada: cuando un hombre puede alcanzar el clímax sexual, pero su semen entra en la vejiga en lugar de salir por el pene.
- Aneyaculación: cuando un hombre no puede eyacular semen.
Otras condiciones físicas que pueden o no ocurrir junto con la disfunción eréctil incluyen:
- Disminución de la libido o deseo sexual.
- Anorgasmia, o falta de excitación a pesar de tener suficiente estimulación.
- Disfunción en los músculos del suelo pélvico.
- Trauma en la pelvis, como fracturas pélvicas.
- Bajos niveles de testosterona.
Según la American Heart Association, la disfunción eréctil puede ser un factor de riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Si tienes síntomas de disfunción eréctil, considera hacerte las pruebas necesarias para detectar cualquier enfermedad cardiovascular.
Complicaciones
La disfunción eréctil puede afectar tu salud y bienestar mental, junto con el de tu pareja.
Puede conducir a complicaciones tales como:
- Vida sexual insatisfactoria.
- Pérdida de la intimidad con tu pareja.
- Tensiones emocionales con tu pareja.
- Depresión, ansiedad, baja autoestima.
- Incapacidad para dejar embarazada a tu pareja femenina.
Es importante saber que estas complicaciones pueden ocurrir como resultado de la condición, pero a su vez, también contribuyen a empeorar los síntomas de la disfunción eréctil creándose de esta manera, el círculo vicioso de la disfunción eréctil.
Si tienes disfunción eréctil, contar con ayuda profesional te evitará caer en este ciclo de síntomas físicos y psicológicos de la DE.
Afortunadamente, casi todos los casos de disfunción eréctil son tratables.
Cuando solicitar atención médica
Si tienes ocasionalmente dificultades para conseguir o mantener una erección, por ejemplo, después de una noche de copas o de un día de trabajo estresante, probablemente no tengas que preocuparte.
En algún momento de su vida, la mayoría de los hombres experimentan este tipo de episodios.
Sin embargo, si dichos episodios ocurren el 25 % de las veces o más, entonces podrías tener disfunción eréctil, y deberías considerar la consulta con un especialista.
Además, si los síntomas empeoran, es posible que haya una causa física que deba investigarse.
También es hora de buscar ayuda profesional en los siguientes casos:
- Tienes ansiedad acerca de tu capacidad para lograr o mantener una erección.
- Tus síntomas están creando un problema con tu pareja sexual.
- Tienes erecciones dolorosas.
Resumen
La disfunción eréctil se define como la incapacidad de lograr o mantener una erección el 25% de las veces o más.
Aparte de estos síntomas físicos, también puede causar síntomas emocionales y psicológicos, como ansiedad, depresión y pérdida de autoestima.
Varios trastornos pueden ocurrir junto con la disfunción eréctil, incluida la eyaculación precoz y la reducción del deseo sexual.
Si tus síntomas se están convirtiendo en un problema regular que te causa ansiedad o crea tensión emocional en tu relación, programa una cita para ver a un médico o sexólogo.
Conclusiones
A pesar de lo común que es la disfunción eréctil, muchos hombres se sienten profundamente incómodos hablando de ello con su pareja sexual.
Sin embargo, la incapacidad de hablar sobre tus necesidades lo único que hace es generar más estrés en tu relación y en ti mismo.
Cuando hables disfunción eréctil, se honesto y abierto con tu pareja. Escucha lo que él o ella tiene que decir, y si deciden que las relaciones sexuales no son una opción, exploren otras formas emocionantes de darse y recibir placer sexual.
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